Listado de la categoría: Bitacora

Para llegar a mejorar y encontrar sentido en nuestras fotografías, si no lo hemos conseguido todavía, lo primero que tenemos que pensar es que queremos fotografiar, y también, que queremos transmitir.

Parece una frase muy tópica y evidente que podemos pensar cualquiera, pero no lo es.

Si yo por ejemplo solo fotografío fruta, pues es muy fácil no… pero cuando lleve haciéndolo 2 años diré; «¿que diferencia mis fotografías a las de cualquier catálogo de supermercado?», y entonces la cosa cambia.

Te empiezas a volver loco. Te llevas una naranja contigo a todas partes y empiezas a fotografiarla con cualquier situación que te encuentras. Estas fotografiando fruta, pero a lo mejor estás haciendo cosas que no hace el resto.

Entonces piensas en que sigues fotografiando lo mismo, siguen siendo fotos buenas, pero son diferentes y lo más importante, te sientes mejor y tu proyecto personal crece.

Los pasos que nos han llevado a hacer esto son:

• Aprender fotografía.
• ¿Que deseamos fotografiar?
• ¿Que queremos transmitir?
• Diferenciarnos del resto (siendo coherentes con lo que hacemos).

En mi caso personal, yo aprendí fotografía y poco tiempo después, en un viaje que hice a Holanda empecé a fotografiarlo todo.

Estaba practicando lo que había aprendido; fotografiando edificios, plantas, piedras, bicicletas, etc…

Cuando volví a Zaragoza miré todas las fotos que había hecho del viaje y las que más me llamaban la atención eran las fotos en las que salían personas. Pero no las fotografías que nos hacíamos entre nuestro grupo de amigos, si no, las fotos de personas haciendo de personas. Por ejemplo, la niña que se acababa de comer un helado. Iba de la mano de su madre, llevaba la cara llena de chocolate y aun con todo; cara de enfado. Yo supuse, que le había echado la bronca su madre por haberse manchado tanto, pero vete a saber… entonces lo vi claro.

Yo quería fotografiar momentos de personas, porque contaban historias que me transmitían cantidad de sentimientos que me hacían pensar más de lo evidente.

Han pasado unos años, y a día de hoy, gran parte del trabajo que yo realizo son fotografía de bodas  e intento hacer precisamente eso, contar la historia del día de dos personas.

Con el ejemplo que os muestro a continuación vais a ver lo fácil que puede ser fotografiar para buscarse a uno mismo. Son fotos que realicé con el teléfono móvil y no tenía intención de nada en especial, pero como siempre busco la curiosidad y darle la vuelta a todo, pues las tomé así.

Vosotros mismos podéis experimentar con ejemplos similares o con el que queráis, pero sobre todo realizar muchas fotografías e identificaros con las que más o sintáis a gusto.

Espero haber ayudado un poco en vuestro camino fotográfico. Si queréis aprender más acerca de este tema o de cualquier otro referente a la fotografía, solo tenéis que contactar conmigo para realizar cursos preparados o a medida.